Una de las cosas que me enorgullece en la vida es haber sido alumna del Colegio Latinoamericano de Integración por 11 años. Allí aprendí muchas de las cosas que me hacen ser como soy, que me hacen mirar el mundo con una visión crítica y solidaria, sin perder el asombro por sus maravillas y atrocidades.
Con una mayoría casi absoluta de hijos de padres de izquierda y muchos niños que regresaban de exilios alrededor del mundo, durante la dictadura el Latino era una burbuja donde se podían hablar de temas que estaban prohibidos en otros colegios.
Quienes pasamos por ahí tenemos un sello indiscutible, algo que se parece mucho a ser familia y esto lo he sentido en especial con la gente de mi curso y de mi generación. Hace un par de años ese entusiasmo me llevó a organizar el encuentro para celebrar (o llorar) una década desde que terminamos el colegio y, además, hice un blog con fotos y relatos que mantengo con cierta regularidad: latino94.blogspot.com
Este mes el Colegio Latinoamericano de Integración celebra 40 años de vida con una fiesta para ex alumnos el viernes 19 y un masivo paseo al Cajón del Maipú el sábado 20. Espero poder ir a este tradicional encuentro en El Manzano y tener uno de esos déjà vu mágicos que experimento cada vez que vuelvo al lugar.
jueves, octubre 18, 2007
martes, marzo 20, 2007
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